El otro día nos pasó una cosa que todavía no os he contado.
En realidad estaba esperando a que subieran el vídeo a Youtube pero como parece que va pa largo os lo voy adelantando.
Estábamos tan tranquilos paseando por el centro (con alguna que otra visita relámpago procedente de la República Checa) cuando una chica nos paró y nos pidió ayuda. Estaban intentando recolectar gente para hacer una flash-mob. Mi primera reacción fue preguntar cuando dinero teníamos que darles -lo sé, soy un poco chunga- pero al cabo de unos minutos ya nos explicaron que era gratis, que lo hacían por diversión y que si queríamos podíamos unirnos.
Lo que teníamos que hacer era hablar por unos vasitos de plástico unidos por un hilo tal y como hacíamos cuando eramos pequeños, pero esta vez en una de las calles más transitadas del centro de Viena. Eramos unos 20 o 30 y dos cámaras nos filmaban. Y sí, la gente se nos quedaba mirando. No tengo fotos en las que se vea todo el sarao porque además de sacarlas tenía que hablar por el chintófono de los vasitos. Pero bueno, os podéis hacer una idea.
Después de unos 10 minutos la cosa terminaba con una de las chicas corriendo y cogiendo todos los vasos y el resto saliendo corriendo en todas las direcciones. Extraño. Sí. Bastante. Pero por lo menos hicimos algo nuevo. Por cierto, al acabar les pregunté a los organizadores si lo hacían para protestar por algo o así, más que nada porque yo seguía pensando que nos iban a pedir pasta -lo sé, sigo siendo chunga-.Pero nos dijeron que no, que “only for fun”, así que cuando suban el vídeo ya os lo enseñaré.
Por cierto, cotilleando por internet he encontrado algunas flash-mobs bastante chulas en Viena (esto de vivir en la capi es lo que tiene), por ejemplo esta o esta.
Y nada, volviendo a lo mío, mañana me toca volver a la tierra siguiendo un itinerario cuanto menos interesante (Ryanair manda): Viena-Bratislava-Roma-Madrid-Zamora-Vigo-Barcelona-Praga-Viena. Pero no os preocupéis, el 4 de abril me tenéis de vuelta por aquí, para seguir contándoos cositas. Más y mejor.
¡Hasta la vista!